Las Emoballenas

Hace tiempo que se sabe que las ballenas son seres muy sensibles. Pero no fue hasta hace poco, cuando se descubrió al emo, que se pudo determinar el tipo de sensibilidad de las de estos entes.
Las ballenas son almas muy pendientes a las problemáticas existenciales del desarrollo en el fondo marino. Toda una vida chupando plancton, aguantando esos percebes, luchando contra calamares gigantes, bancarte a los ponjas, un chabón de greenpeace en el lomo y tener pelos en lugar de dinentes como el común de los mamíferos, son algunas de las cuestiones que suelen angustiar profundamente a las ballenas.
Las ballenas tiene una gran inteligencia pero les falta algo, un buen pulgar marca Pulgaroponible para poder desarrollar una cultura que les permita palear sus angustias y no tener que moverse eternamente en un éxodo oceánico alrededor de la tierra. No sabemos si los cetáceos creen en dios. Pero así y todo tiene algo de cultura desarrollada y últimamente cuentan con el apoyo de Javier Calamaro que les canta en su periodo reproductivo en las costas argentinas.
De hecho fue él quien les enseño a expresar sus sentimientos de una forma muy particular y fue de esta manera que se llego a la conclusión de que las ballenas eran emos. Escuchemos:

como dijimos las ballenas no tienen pulgares oponibles y no se pueden practicar cortes pero si se dan la biaba en los pelos de sus mandíbulas para lograr el efecto lengüetazo de vaca.